miércoles, 27 de febrero de 2013

Enhorabuena a nuestros jóvenes estudiantes


Enhorabuena a mis paisanos, jóvenes sanclementinos, por su discurso en el Parlamento Europeo el día de ayer. Mis más sinceras felicitaciones. Os doy las gracias porque Europa casi se lleva una idea equivocada de lo que es nuestro país. En los tiempos que corren tan difíciles para España, en los que los mercados no confían en nosotros, en los que la diplomacia española está enterrada en las cenizas de la incertidumbre, en los que nuestra sociedad sufre un éxodo de jóvenes con futuro hacia otros países que tienen dinero y educación, en tiempos en los que precisamente la educación es el descalabro no sólo de nuestro presente más inmediato, sino de nuestro futuro… salís a un púlpito con la misma facha con la que vais a una hamburguesería con los colegas, y despejáis todas las dudas sobre por qué España está como está. En el mismo metro cuadrado en el que François Miterrand pronunció su histórico discurso sobre los peligros de los nacionalismos, en el mismo espacio donde Durao Barroso propuso un proyecto para hacer una sóla nación europea, allí se presentan dos sanclementinos porque tienen algo que decir. Sí señor. En un inglés de preescolar, entre risas y con una inconsciencia intolerable, dais un discurso pleno, redondo. ¡Y encima decís de dónde sois! Pues sí, enhorabuena por ayudar a que Europa no se lleve una idea equivocada de lo que es España, repito. Casi vuelven a confiar en nosotros. Deberíais salir todas las semanas a dar discursos así para recordar a nuestros vecinos que en España no hay nada más que garrulos, gente sin futuro, jóvenes que sólo piensan en qué pub se van a gastar la paga de sus padres, los cuales deberían echarse a llorar al ver que lo más grande a lo que pueden llegar sus hijos es al Parlamento Europeo para decir “sajerao España”. Quizás debería dejar la ironía aparcada y tendría que decir que estoy en total de acuerdo con vosotros. Esto es “sajerao”, España, muy “sajerao”. Es “sajerao” que vuestro profesor de inglés os haya dejado hablar en inglés en este lugar. Es “sajerao” que el director de vuestro instituto haya consentido que vosotros, que no seréis con seguridad de lo más destacado del Torrente Pérez, nos representéis a los jóvenes de San Clemente, de Cuenca y de España, y sería “sajerao” que haya una sóla persona que se sintiera orgullosa de haberos visto en Youtube, en las redes sociales y en los medios de comunicación, en los cuales nos avergonzamos muchos conquenses y españoles de vuestras palabras.
 
Debéis saber que muchos jóvenes pagaríamos por tener la oportunidad que vosotros habéis tenido al ir a un sitio así y poder expresaros. Sois la envidia de muchos jóvenes que tenemos cosas que decir, ideas que aportar. Los políticos deben tener en cuenta nuestra opinión. Nuestros vecinos deben escuchar la voz de una España que quiere remontar y ocupar el sitio que se merece. En España hay jóvenes preparados, hay talento y muchas ganas de proponer. Pero también hay mucho gañán. No sabéis lo que me duele que vosotros seáis del segundo grupo, el de los gañanes. Payasos que no tienen nada que aportar más que una payasada que ni si quiera es suya, sino que es de un programa de televisión que no voy a poner aquí por ser excesivamente cultural para mi blog. También debéis saber que los personajes a los que hay que rendir honor en discursos parlamentarios deberían ser otros, y no los personajillos de los reallity shows de mierda. Pero la culpa no es vuestra. Vosotros simplemente sois el producto de una educación pestilente, de un instituto de pacotilla, de risa, igual que su directiva, la cual nunca ha destacado por dar brillantez a sus alumnos. Vuestro director debe sentirse orgulloso de vosotros, y si no orgulloso, al menos identificado con vuestra educación.
Espero que vuestra conciencia os diga que lo que habéis hecho no está bien. Ojalá la evidencia de vuestro error os haga recapacitar y os toméis en serio esto de la educación, del saber estar, del conocer y del hacer algo por los demás. Aunque sólo sea para que cuando volváis al Parlamento Europeo tengáis algo más interesante que decir.